"HERMOSAS COMO LAS FLORES".
Tengo una novia señores;
y dos "queridas" en secreto,
las tres de varios colores...
Las tres me tienen respeto.
Me enteré en casualidad;
que mi novia era casada,
su esposo una nulidad...
Con su "trabajo" en Granada
No me importó por vergüenza;
y no comenté tal hecho,
vivían los dos en Siguenza...
Por norma y por derecho.
A mi me contó su vida;
más olvidó a su marido,
con los cuernos a escondidas...
Un amor que había perdido.
Yo no le conté mi historia;
las tres "trabajaban" juntas,
las dos amigas de Gloria...
Las dos historias "muy justas".
Proseguí en mis escarcéos;
con tal gentiles y hermosas,
su marido; un tal Tadéo...
¿Eran las tres tan preciosas.
Rubia, morena y castaña,
tres princesas del Olimpo,
una gitana y dos mañas...
Y un señorito muy limpio.
Más por lo visto el marido;
nada sabia de su vida,
anciano más, no dormido...
Me pilló en una comida.
Por una foto de Gloria;
me dijo que era su padre,
sus embustes en la historia...
Eran de mujer cobarde.
Me expuso con mucho genio;
las verdades de mi amante,
díjome llamarse Eugénio...
Más no le creí bastante.
Cuando salió el nombre Gloria;
el hombre se enfurecía,
tornando a la misma historia...
Lo mucho que la quería.
Yo quedé tonto y perplejo;
de tal pasión de aquel hombre,
con canas y algo más viejo...
El cual le ofreció su nombre.
-. Esta novia que tenéis;
que vive bajo su techo,
¿que queréis, que pretendéis...
Yo soy recto en mis derechos.
Se encuentra muy bien casada;
con un hombre muy pudiente,
pero él no está a su alzada...
Pero se encuentra pendiente.
Quiero pedirle señor;
que la deje y que la olvide,
esta historia es un error...
Es la razón y la divide.
Dejad de tirarle trastos;
que la futura "princesa",
ni la Luna ni los astros...
A ella no le interesa.
Su educación le permite;
entablar sus relaciones,
más su marido no admite...
En su estado las traiciones.
¿Si tratáis de arrebatarle;
el cariño de su vida,
también tendrá que retarle...
A eso mismo le convida.
Con estas palabras llanas;
imperiosas con veneno,
con un fuego con sus llamas...
Habla el amor verdadero.
¿Si yo dejaba a mi Gloria;
aún me quedan otras dos,
y así se acabó la historia...
Sin gran pena y sin dolor.
"Guti".
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