"DIVORCIOS Y DESPEDIDAS".
.- El amor es muy extraño.
Ocurre en las despedidas.
Por culpa de los engaños...
Nunca son bien recibidas.
Miradas suaves pérdidas.
Un mirar de enamorados.
Siendo mujer y querida...
Y el romance se ha acabado.
Un mirar de enamorados.
Siendo mujer y querida...
Y el romance se ha acabado.
Los sentimientos aislados.
Nunca se tomó medidas.
Ya no estaba enamorado...
La relación bendecida.
Nunca se tomó medidas.
Ya no estaba enamorado...
La relación bendecida.
Yo era un cielo en su vida.
Pero surgen las sorpresas.
Se abren viejas heridas...
Y no sientes lo que expresas,
Hay bocas que no se besan.
Sólo un apretón de manos.
Las quejas se desperezan...
Son sentimientos humanos.
Lo que sentimos y damos.
No queda sobre la mesa.
Aquello que recordamos...
Se acabaron y se comienza.
Solo queda la tristeza.
Y un intenso escalofrío.
Con dolores de cabeza...
Mientras ves corriendo el río.
Pero surgen las sorpresas.
Se abren viejas heridas...
Y no sientes lo que expresas,
Hay bocas que no se besan.
Sólo un apretón de manos.
Las quejas se desperezan...
Son sentimientos humanos.
Lo que sentimos y damos.
No queda sobre la mesa.
Aquello que recordamos...
Se acabaron y se comienza.
Solo queda la tristeza.
Y un intenso escalofrío.
Con dolores de cabeza...
Mientras ves corriendo el río.
Cien flores en su rocío.
Un clavel rojo y precioso.
Como un invierno sin frío...
Entre rosales hermosos.
Son amores orgullosos.
Y un presente que no avanza.
Era un idilio precioso...
¡Una meta que no alcanzas!.
Un hijo que da esperanzas.
Un infante que despierta.
Un pecho que lo amamanta…
En la habitación desierta.
Un clavel rojo y precioso.
Como un invierno sin frío...
Entre rosales hermosos.
Son amores orgullosos.
Y un presente que no avanza.
Era un idilio precioso...
¡Una meta que no alcanzas!.
Un hijo que da esperanzas.
Un infante que despierta.
Un pecho que lo amamanta…
En la habitación desierta.
Es el instinto que aprieta.
Un símbolo que domina.
Para no dormir la siesta...
Entre ambos en nuestra vida.
Un símbolo que domina.
Para no dormir la siesta...
Entre ambos en nuestra vida.
Un cojo que no camina.
Un manco que no descansa.
Un banco en donde dormitan…
Mis más tiernas esperanzas.
Se han roto cien mil balanzas.
Los ricos que nos admiran.
Como marca la ordenanza...
Mientras los pobres caminan.
Un manco que no descansa.
Un banco en donde dormitan…
Mis más tiernas esperanzas.
Se han roto cien mil balanzas.
Los ricos que nos admiran.
Como marca la ordenanza...
Mientras los pobres caminan.
Un ciego que no nos mira.
Un sordo que no oye nada.
Un cojo que no camina..
Te sientes desengañada.
Por tus penas no hacen nada.
Como mujer como dama.
La vida ha sido mala...
Y terminas amargada.
Es la vida cotidiana.
Siendo un placer inseguro.
Triste vas por la mañana...
Por las noches los apuros.
Hay momentos que son duros.
Cuando el casero te llama.
Te escondes en lo más oscuro...
Ya no te queda ni lana.
Un sordo que no oye nada.
Un cojo que no camina..
Te sientes desengañada.
Por tus penas no hacen nada.
Como mujer como dama.
La vida ha sido mala...
Y terminas amargada.
Es la vida cotidiana.
Siendo un placer inseguro.
Triste vas por la mañana...
Por las noches los apuros.
Hay momentos que son duros.
Cuando el casero te llama.
Te escondes en lo más oscuro...
Ya no te queda ni lana.
Vas mirando en tu ventana.
La tarde cruda y oscura.
Te apoyas sobre tu cama...
¡Allí prosiguen tus dudas!.
Autor: Jesús Gutiérrez Pascual.
La tarde cruda y oscura.
Te apoyas sobre tu cama...
¡Allí prosiguen tus dudas!.
Autor: Jesús Gutiérrez Pascual.