"UN OFICIO DE QUERIDO".
"Camino largo y pesado;
donde recuerdas tu historia,
una historia del pasado...
De mentiras y de gloria.
Una vez lo has conseguido;
desgranarla en la penumbra,
no te sientes ofendido...
Más el recuerdo a la tumba.
Tenia veinte primaveras;
hermosa linda y preciosa,
yo la quería de veras...
Más ella es silenciosa.
Tenia un nombre precioso;
Jessica "la rubiales",
con un cuerpo tan hermoso...
Con "hechuras" muy reales.
Fue una tarde de Invierno;
en parque muy silencioso,
la besé con mucho tiento...
Me sentía avaricioso.
Mala gente que camina;
que mancha todo lo verde,
a veces uno se arrima...
Y no es eso que pretende.
No pretendía hacer daño;
no quería verla llorar,
quizás a sus veinte años...
No era tiempo de soñar.
Después del acto de amor;
ya me sentía muy malo,
la besaba en el rincón...
En un parque abandonado.
La honra de una mujer;
es muy seria y se percata,
la mujer en su querer...
Siempre te dará la lata.
A mi me hizo prometer;
presentándome a sus Padres,
por un rato he de ejercer...
Que por poco no me ladren.
Más llegó el día maldito;
me presentó como un novio,
atado y bien atadito...
Me tacharon de Tenorio.
Me entraron escalofríos;
al saber su profesión,
era un policía muy frío...
Ya me veía en prisión.
Era fuerte y con mostacho;
su Madre era carnicera,
¿donde te has metio muchacho?...
Has de cambiarte de acera.
¡¡Joder con la media hora;
que había estado con ella,
donde acabó sin "la honra"...
Mi mala vida se estrella.
Cierto día dijo un amigo;
¡¡ten cuidao que te los "pone",
no entendí que iba conmigo...
Al recordar mil razones.
Pasé seis meses con ella;
y me anunció su embarazo,
¡¡maldición mi mala estrella...
Veía cien mil tortazos.
Se lo había dicho a su Madre;
y parecía muy tranquila,
¿cuando se entere su Padre...
Seguro que me trasquila.
Fue en su día de cumpleaños;
cuando le asistí a su fiesta,
la Madre cincuenta años...
Las manos las tuve quietas.
Esperaba un buen repaso;
de esta mujer tan siniestra,
me esperaba con dos vasos...
Y me entregó el de su diestra.
Me contó el embarazo;
contando los cuatro meses,
cuando me cogió del brazo...
Me encontré como las reses.
Hermosa y muy puñetera;
me habló de un joven teniente,
que también iba a la espera...
Siendo un buen terrateniente.
Después de casi tres horas;
me descubrió que era el Padre,
que sin saber que la honra...
Me la ofreció a mi en el parque.
Yo ya notaba algo raro;
cuando me avisó mi amigo,
yo me encontraba en el paro...
El "otro" era guapo y rico.
Se disculpó la mujer;
y a mi me quitó un gran peso,
porque es querer, es querer...
Encontrándome deshecho.
Casi un año con dos novios;
vaya zorra y cuanta prisa,
creyéndome un buen Tenorio...
Siendo un cornudo de risa
Por un lado me alegraba;
se casó con el teniente,
eso no la descartaba...
De tener más pretendientes.
Cierto día se me acercó;
con el carrito y el crío,
yo confuso y me besó...
Y dijo que era hijo mio.
Desde entonces tengo amante;
su marido era impotente,
en la cama era constante...
Más, señora muy decente.
Hoy soltero y con amante;
sin trabajo y "sostenido",
es ser un hombre importante...
Este oficio de querido.
El teniente estaba fuera;
se tiraba hasta seis meses,
mientras mis dos hijos juegan...
¡¡Y hago el amor si apetece.
"Guti".
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