"DOÑA INÉS:
"Presiento el encuentro tuyo;
salgo al instante a tu cuerpo,
no temas que yo no huyo...
¡¡Deja que fluyan los cuervos.
Te sorprendo acariciando;
bajo el frescor de las flores,
bajo el árbol "palo-santo"...
Bajo el cuerpo; mil colores.
Bebo tu pasión con calma;
besos que encienden pasión,
que al revestirse mi Alma...
Se endurece el corazón.
El aroma de las flores;
perfumaron mi almohada,
nacida entre mil colores...
Mi frenesí queda en nada.
Aquellos tiempos en calma;
cuando besabas mi cuerpo,
y acariciabas mi Alma...
Allí quedan mis recuerdos.
La fragancia de tus besos;
el perfume de las rosas,
sólo me ha quedado eso...
¡¡Solo me quedan dos cosas:
Tu candidez e ignorancia;
tu prestancia y juventud,
tu constancia y arrogancia...
Y tu cuerpo con "salud".
Me estremecí entre tus brazos;
di largas a mi pasión,
entre tus besos y abrazos...
Se encendió mi corazón.
¡¡Gotas de lluvia maldita;
que me traes los recuerdos,
que me ha amargado la dicha...
Con el destrozo de un cuerpo.
"Guti".
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