"LAS MENTIRAS DE LAS LEYES".
"La verdad en los hombres duchos;
en leyes con pico largo,
uno alto y delgaducho...
Y el Juez con bata a su cargo.
Dejando libre al ladrón;
acusando al más honrado,
uno porque si pecó...
Y el honrado trasladado.
Los abogados lo aprueban;
y queda el honrado en malo,
lo manejan y lo reprueba...
No dejan títere sano.
Porque escogió al de oficio;
por no tener un dinero,
viven en buen edificio...
Y el bueno sólo es minero.
Todos van muy bien vestidos;
no se quejan de los precios,
los dos ya se han divertido...
Uno alto y otro recio.
El alto sonríe en pronto;
y el bajo que lo acompaña,
el honrado queda tonto...
Haciendo mala campaña.
Con el sudor de su frente;
por romper un mandamiento,
no teniendo referente...
Una Ley de "enjuiciamiento".
¡¡Magnates estafadores;
que roban a los honrados,
ni una ley de acreedores...
Que ampare a los desterrados.
Ellos si son delincuentes;
el Fiscal y el Magistrado,
con sus togas son valientes...
Sin ellas unos desgraciados.
Al Fiscal acusatorio;
un millón de este rebaño,
le gritaron "casi todo"...
Juez y Fiscal se aunaron.
En algunos disidentes;
por la vergüenza y el miedo,
se portan como inocentes...
Con un Fiscal como el hielo.
Con las togas del honor;
trocaron bien sus afectos,
se portan con deshonor...
¡¡Ni es la Ley, ni son rectos.
El abogado defensor;
peregrina como un ciego,
defiende a quien denunció...
Al minero; "un tal Diego".
El Fiscal se dirigió;
donde yo estaba sentado,
leyendo se corrigió...
Se abstuvo estaba encantado.
¿No es cierto que el día trece;
cuando usted entró en la mina,
y le ordenan que enderece...
La viga, y ni se la mira?.
¿No es cierto que por su culpa;
han muerto cinco mineros,
un carretón en la curva...
Costando mucho dinero.
-Señoría yo lo avisé;
del peligro de la viga,
aquel día la revisé...
Y estaba como podrida.
Se lo dije al capataz;
pero él no hizo caso,
no creo que fuera capaz...
Pues esto seria un fracaso.
Incluso envié una nota;
del peligro que corrían,
"la viga casi está rota"...
La envié al medio día.
El dueño y el capataz;
con mentiras se asociaron,
nunca los creí capaz...
Solo a mi que me acusaron.
Con la causa que previene;
son distintos en sus formas,
cogen las que más convienen...
Y consiguen la reforma.
Roban en las buenas leyes;
robar en la Ley es malo,
no son Jueces ni son reyes...
Y eso para mi es un "palo".
Más si lo tuyo condenan;
no es de Ley ni es honrado,
hoy la Ley da hasta pena...
Con Jueces muy deshonrados.
Si una condena es injusta;
los Jueces tiro por tierra,
con lo que a mi me disgusta...
Los Fiscales los entierran.
Con los mármoles romanos;
lo comentan cinco lenguas,
los Jueces son como hermanos...
¡¡Ojalá corran mil leguas.
Que no se hicieran sus dueños;
estas leyes tan injustas,
solucionarlas es un sueño...
Y a los honrados disgustan.
Porque solamente en ellas;
también surgen poderosos,
gentes con muchas estrellas...
¡¡Son gentuza y muy babosos.
Es de mala condición;
que a las leyes den atraco,
de un Fiscal acusador...
Con el Juez paso mal rato.
Demostrar con inocente;
que es culpable en los delitos,
que todos son indecentes...
Y es Juez terminando frito.
Liberando al mal ladrón;
el Juez se erigió en verdugo,
y el Fiscal que era un cabr...?...
Se decantó por ser duro.
Más yo no tenia dinero;
para pagar a los tunantes,
¡¡ya les dije; soy minero...
Y el capataz un magnate.
No teniendo más remedio;
que solicitar ayudas,
y gritar por otros medios...
Y ahí me entró calentura.
Mientras testigos con ira;
van gritando por sus fueros,
desaprueban las mentiras...
Son capaces y meten fuego.
De acusadores menguantes;
se vengaron los pequeños,
arrastrando a los tunantes...
Tres de "Cai" y un malagueño.
Muy fea pintan la envidia;
yo confieso que la tengo,
es como la misma tiña...
de la avaricia retengo.
De los Jueces que no saben;
quién vive pared por medio,
los Fiscales son reales...
Pero no ponen remedio.
-¡¡Gritando están Señoría;
la parte que es demandante,
se que es una tontería...
Porque los dos son tunantes.
Los demandados asustados;
el dueño y el capataz,
testigos "acojonados"...
Querían salir del lugar.
Y el Fiscal que sonreía;
y el Juez que lo lamentaba,
un policía no quería...
Viendo la mala pasada.
El público arremetió;
contra el Fiscal por veneno,
pero el Juez también cobró...
Dos comprados con dinero.
Los familiares en ristre;
de los cinco fallecidos,
arremetieron muy tristes...
Siendo el Juez el elegido.
En España pasan cosas;
con villanos de esta clase,
villanías desastrosas...
Con sus togas y "malajes".
"Guti".
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