"EL MINOTAURO EN TU CASA".
"Cuanta gente la padece;
cuanta gente no lo dice,
algunas se compadecen...
La soledad se maldice.
Un amigo es un tesoro;
no tiene precio en dinero,
si lo tienes es un decoro...
Aunque sea un pobre minero.
La belleza está por dentro;
el físico es importante,
eso ya está descubierto...
Lo otro es muy rinbombante.
Aquel día acabé pronto;
cerré el despacho y me fui,
hacia un día muy tonto...
Y temía un gran desliz.
Lucia un sol muy precioso;
lo de tonto me gustaba,
si comentaba lo hermoso...
Lo tonto me disgustaba.
Me esperaba mi Carmela;
vaya sorpresa la suya,
en su piso de soltera...
Con sus enfados y sus puyas.
Con el trabajo que tengo;
seguro que no me espera,
cada día me entretengo...
Y ella se desespera.
La llave me la pidió;
tendría que pedir ayuda,
ya no se que me explicó...
Porque llave sólo hay una.
Llegué al edificio cuatro;
eran viviendas de ricos,
el portero un vivaracho...
De propinas, un buen pico.
Me dio la llave maestra;
por un billete de cien,
era la forma correcta...
Eso paraba cien pies.
Me subí en el ascensor;
le iba a dar una sorpresa,
yo siendo un hombre mayor...
Y los años siempre pesan.
Le llevaba veinte años;
según ella no es problema,
pero a mi me hacia más daño...
Y ella se ponía tensa.
Yo sólo era el "pagano";
más ella a mi me adoraba,
tuvo historia de un soldado...
Pero no la recordaba.
Llegué al último piso;
de Carmela fue un capricho,
según decía hay un dicho...
Que encima no quería "bichos".
Los bichos eran personas;
no le gustaban los ruidos,
fue nacida en Barcelona...
Y de allí había huido.
La llave en la cerradura;
y la abrí muy cauteloso,
porque soy un cara dura...
Y soy un tío asqueroso.
Lo que digo es todo broma;
soy muy digno y caballero,
porque soy buena persona...
De mi Empresa consejero.
Entré en el piso sin ruido;
oí risas y cachondeo,
aquello no era un descuido...
Eran voces y choteos.
Como yo era importante;
en la Empresa me encargaba,
con sumas impresionantes...
Una pistola llevaba.
La desenfundé despacio;
quitándole su seguro,
de la puerta había un espacio...
Para mi fue algo duro.
Con la vivienda a mi nombre;
yo era el dueño y el señor,
no creí que hubiera un hombre...
Más podría ser un matón.
Atravesé las penumbras;
y llegué a la habitación,
un silencio de ultratumba...
Se apoderó en un rincón.
La puerta estaba entornada;
sólo había una bombilla,
vi a mi Carmela encantada...
Y un hombre encendía cerillas.
Era joven y muy moreno;
y encendía un cigarrillo,
otro entregó con sus dedos...
Era blanco o era morillo.
Contemplando su perfil;
su nariz era prominente,
Carmela empezó a reír...
Para mi era diferente.
Me dio pena y mucho asco;
sentí un daño increíble,
aquello fue un gran fracaso...
Viéndole no era creíble.
Sentí una rabia inmensa;
mis manos ya me temblaban,
al retroceder una mesa...
Un jarrón me resbalaba.
El ruido alertó a Carmela;
y el joven salió hacia fuera,
el hombre que la camela...
Con una pistola fiera.
Esto le dio un sobresalto;
y desnudo como estaba,
era un poquito más alto...
Su moreno resaltaba.
Quedó mudo quedó tieso;
al ver aquella pistola,
al apoyarse en un tiesto...
Se dio un golpe en la "titola".
Carmela salió al pasillo;
tan desnuda como el mozo,
aquel joven tan listillo...
Tan guapo y tan hermoso.
Carmela empezó a gritar;
aullaba como una loba,
auxilio a solicitar...
Se comportó como boba.
Los vecinos se agolpaban;
en el pasillo de fuera,
a la policía llamaban...
Era gente forastera.
Tardaron casi una hora;
y vino la policía,
Alfredo tenia su honra...
Carmela lo maldecia.
Él se enfundó su pistola;
abriendo presto la puerta,
un policía dijo; hola...
El otro era de "alta puerca".
Robusto fuerte y muy bajo;
se enfrentó al pobre Alfredo,
Carmela lloraba un "tajo"...
Y el moreno muy entero.
Cuando se aclaró este caso;
Carmela hizo las maletas,
aquello fue un gran fracaso...
Iba enseñando las tetas.
El moreno detenido;
lo trataron de agresor,
vistiéndose entretenido...
Era un chulo y macarrón.
Tenia ficha policial;
con unos cuantos delitos...
con asuntos pericial...
No quedaba muy bonito.
Aquí se acaba la historia;
no le pase a usted lo mismo,
piense que vive en la gloria...
Con un chulo o asesino.
Consejos no voy a dar;
pues tengo algunos años,
esto les puede pasar...
Y cuando pasa, hace daño.
Avisen si van a casa;
y no den muchas sorpresas,
hay hombres con mucha casta...
Y mozas sin enteresa.
Carmela fue detenida;
por cómplice en sus delitos,
Alfredo se lo temía...
Cornudo igual que el "mito".
Sospecho que veinte años;
o quince que son lo mismo,
son años que hacen daño...
En la pareja y su ritmo.
"Guti".
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