"LA VIDA TODO LO ARREGLA".
.- Los hermanos eran vecinos.
Pero uno era un tunante.
Gestor de juergas y vinos...
Se enamoró el comediante.
Hubo boda el mes mediante.
Su esposa trajo a su hermana.
Hubo un conflicto galante...
Y huyó a las tres semanas.
Maria José De Santana.
Pidió ayuda a su vecino.
Le explicó lo de su hermana...
En una noche de vinos.
Su cuñado contravino.
Que su hermano hizo el daño.
Llenos hasta arriba de vinos
Su hermana haría el apaño.
Ya habían pasado dos años.
Y las lluvias amenazaban
Pensó que no hacia daño.
Mientras la noche avanzaba.
En la alfombra reposaban.
En silencio y muy unidos.
El fuego que respiraban...
Sin el frío ni su ruido.
Con su marido había huido.
Su bienestar más risueño.
Otro amor más convenido...
Más joven con menos ceño.
Había culminado el sueño.
Un sueño y una pasión.
María ya tenia otro dueño...
¡Pensó en otra misión!.
Los dos fueron a prisión.
Su marido y su cuñada.
Hay leyes en la inquisición...
Robaron en la Cañada.
Se enteró por la encargada.
Victoria Antonia de Vargas.
La Finca estaba cerrada...
El robo no es que lo valga.
Gestor de juergas y vinos...
Se enamoró el comediante.
Hubo boda el mes mediante.
Su esposa trajo a su hermana.
Hubo un conflicto galante...
Y huyó a las tres semanas.
Maria José De Santana.
Pidió ayuda a su vecino.
Le explicó lo de su hermana...
En una noche de vinos.
Su cuñado contravino.
Que su hermano hizo el daño.
Llenos hasta arriba de vinos
Su hermana haría el apaño.
Ya habían pasado dos años.
Y las lluvias amenazaban
Pensó que no hacia daño.
Mientras la noche avanzaba.
En la alfombra reposaban.
En silencio y muy unidos.
El fuego que respiraban...
Sin el frío ni su ruido.
Con su marido había huido.
Su bienestar más risueño.
Otro amor más convenido...
Más joven con menos ceño.
Había culminado el sueño.
Un sueño y una pasión.
María ya tenia otro dueño...
¡Pensó en otra misión!.
Los dos fueron a prisión.
Su marido y su cuñada.
Hay leyes en la inquisición...
Robaron en la Cañada.
Se enteró por la encargada.
Victoria Antonia de Vargas.
La Finca estaba cerrada...
El robo no es que lo valga.
Raimundo volvió a la carga.
Besando cintura y pechos.
María le aconsejaba:
¡Le otorgaba sus derechos!.
En un inmediato trecho.
Sintió que la penetraba.
Con abrazos más estrechos...
Se sintió feliz y amada.
Sus sentidos la llamaban.
Vió a su amante más amable.
Los dos cuerpos en la explanada...
Con momentos mejorables.
Fue una noche memorable.
Con caricias con las manos.
María no era desechable...
Con sus deseos de humanos.
Con un cuerpo bello y sano.
Unos pechos exuberantes.
Donde maman los enanos...
Ambos eran tolerantes.
Los dos ardientes amantes.
Maria lloraba y reia.
Pero su ardiente galante...
La amaba y le sonreía.
Autor: Jesús Gutiérrez Pascual.- Guti.
Besando cintura y pechos.
María le aconsejaba:
¡Le otorgaba sus derechos!.
En un inmediato trecho.
Sintió que la penetraba.
Con abrazos más estrechos...
Se sintió feliz y amada.
Sus sentidos la llamaban.
Vió a su amante más amable.
Los dos cuerpos en la explanada...
Con momentos mejorables.
Fue una noche memorable.
Con caricias con las manos.
María no era desechable...
Con sus deseos de humanos.
Con un cuerpo bello y sano.
Unos pechos exuberantes.
Donde maman los enanos...
Ambos eran tolerantes.
Los dos ardientes amantes.
Maria lloraba y reia.
Pero su ardiente galante...
La amaba y le sonreía.
Autor: Jesús Gutiérrez Pascual.- Guti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario