jueves, 12 de noviembre de 2020

"LA VIDA TE DA SORPRESAS".



"MI CONSUEGRA ERA MI DIOSA".

.- Sólo la he visto una vez.
Me dio un vuelco el corazón.
Como el anzuelo en un pez...
Sin más tiempo ni razón.

Vi su alegre aparición.
Vestía alegremente.
Noté sudor en mi frente...
Como un bobo en sedición.

Pensamientos una legión.
En mi vientre mariposas.
La vi bella y muy hermosa...
Fue muy rara esa afición.

Que me sirva de lección.
A tierra se fue mi vaso.
Esa no fue mi intención...
¡Quedé lelo en el ocaso!.

Esta vida es un traspaso.
Hemos hecho un recorrido.
¡Los últimos un fracaso!...
En los que hemos vivido.

Tienes que ser recogido.
La soledad es muy dura.
Las noches son más oscuras...
¡Nunca las he preferido!.

A veces he salido herido.
Otras muerto en llamaradas.
Nunca he sido bienvenido...
Sólo espero sus llamadas.

Estoy loco con mi amada.
Amores ella no quería.
Casada y con compañía...
Nunca fue feliz ni amada.

No me acepta mis llamadas.
Yo enviudé hace años.
Tengo victorias ganadas...
No quiere tener engaños.

Muy pronto es su cumpleaños.
¿Qué tendría que regalarle?.
Tampoco quiero amargarme...
Sin propuestas y sin daño.

El preguntarle los años.
Fue una grosería graciosa.
Es una mujer de apaños...
Es increíble y hermosa.

Una dama tan preciosa.
Con el corazón vacío.
Su cuerpo estará muy frío...
Pero ella es orgullosa.

Sus respuestas amistosas.
Ha conseguido su esfera.
La veo algo caprichosa...
En sus ojos veo la fiera.

Blanca piel como la cera.
Con sus pechos tan erguidos.
Con tantos años cumplidos...
Pone franja a su frontera.

Con un moño por montera.
Lo aprisiona un rojo lazo.
Falsa como misionera...
Nuestras vidas es un fracaso.

Llegaremos al ocaso.
Hasta rozar la agonía.
Terminará mi alegría...
Con cosas que nunca alcanzo.

Por mi ya di varios pasos.
Al principio hubo fortuna.
Varias noches de descanso...
Mirando la eterna luna.

Nunca he tenido fortuna.
Mi paraíso se abría.
Al principio no quería...
Más era tiempo de hambruna.

Le amaba como a ninguna.
Sus besos eran de miel.
Mis sueños eran de locura...
Besando su tierna piel.

Su hermosura tenía un diez.
Como un sueño era un tesoro.
Brillantes sus ojos moros...
Me dijo que estaba bien.

Autor: Jesús Gutiérrez Pascual.- Guti.

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