sábado, 1 de diciembre de 2018
"TENGO QUE CAMBIAR DE VIDA".
"¡A ESTE PASO AL CEMENTERIO!".
.- Soy culto y dicharachero.
Soy romántico y galante.
Me encanta un buen puchero...
Y una mujer como amante.
Les explicaré bastante.
Como van mis ronroneos.
Entre romances y cantes...
Mis más sinceros deseos.
Es poco lo que poseo.
La vida es muy cruel y dura.
El dinero no lo veo...
Mis dietas son muy oscuras.
Mi amada es pura dulzura.
Me da cobijo en su cama.
Las noches; ¡una locura!...
Tiene marido y hermanas.
Deja abierta su ventana.
Está a dos metros de altura.
Duerme muy sola en su cama...
Tiene estudios y cultura.
La calle la encuentro oscura.
Al trepar lo hago aprisa.
En mis manos hay quemaduras...
Al entrar oigo sus risas.
Al leer lo que se guisa.
Van creciendo mis deseos.
Me descompone las prisas...
Son poemas; ¡no un tebeo!.
Leyendo mariposeo.
En las hojas del poema.
Son románticos; lo veo...
Son de amores y de penas.
Un suplicio esta condena.
La noche es una locura.
Sin luz con el cuarto a oscuras...
Mis amantes en cadena.
Me encantan más las morenas.
Las rubias se contradicen.
Hay amantes con condena...
Los Jueces así lo dicen.
Sus ojos reían felices.
En su boca se divisa.
Una preciosa sonrisa...
Con nostalgia sin matices.
Entre novios se maldicen.
Son agrias y muy graciosas.
Estas historias predicen...
¡Que son guerreras y hermosas!.
Se ven hermosas las rosas.
Y alegres las margaritas.
Se han visto pocas marchitas...
Vuelan lindas mariposas.
Viendo parejas que gozan.
Entre sus ideas malditas.
Hay peligros si se rozan...
¡Se apartan!; otras meditan.
Cuando la brisa se agita.
Hay alondras y pajarillos.
El sol suave y amarillo...
Los coloretes despintan.
Los varones se desquitan.
Fermentando la locura.
Con los corpiños que quitan...
Menguando a las más duras
Las damas con su dulzura.
Les dicen cuanto les quieren.
Que al amar tienen sus dudas...
Los celos nacen y mueren
Algunas marcan deberes.
Otras beben en botellas.
Son graciosas la mujeres...
Muy pocas han dejado huella.
Algunas se creen más bellas.
Son más torpes que sus hijas.
Un gran número; son fijas...
Tan lejanas como estrellas.
En todas ha quedado mella.
Mi amada es plena hermosura.
Lanza lejos su botella...
En sus ojos veo locuras.
Como no veo tengo dudas.
¿Si es la casada o su hermana?.
Es invierno y no hay luna...
Siempre empuja hacia su cama.
Por su afecto ella me ama.
¡Tengo tantas en mi lista!.
Nunca paran y me llaman...
¡Joder!; tengo una revista.
Son preciosas a ojos vistas.
En total una docena.
Las mayores idealistas...
Las menores me dan cena.
Las solteras me dan pena.
Aún con novios pasan hambre.
Los vicios es una cadena...
¡Y yo estoy como un alambre!.
"Guti"."El Romancero".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario