viernes, 22 de diciembre de 2017

"YO BUSCABA LA MALA VIDA".


 La imagen puede contener: una persona, sentada y exterior

"TENIA HERIDAS EN MI ALMA".

.- Mi drama no es de recatos.
Si es que estoy casi conversa.
Entre cosas muy diversas...
Que las vivo y las acato.

Me hacia pagar el pato.
Con chunga y con chulería.
Y yo me avenía al trato...
En el fondo él me quería.

Muy loco en sus correrías.
Con sus infames historias.
Que Dios lo tenga en la gloria...
Lo que nadie entendería.

Mi cuerpo se encendería.
Si yo cámbiese mi vida.
Eso lo defendería...
Aquel que ama no olvida.

En amor fui muy querida.
Pero fue ruin y muy malo.
Sin desenfrenos humanos...
Que salia torpe y herida.

Hay torpes que no convidan.
Muchas no lo merecían.
Son comedias repetidas...
Mientras otras se reían.

Es lo que yo no entendía.
Sus cuentos y sus chanchullos.
Reclamaba con su orgullo...
Que me amaba y me quería.

Viviendo en una Arquería.
Sus celos iban encendidos.
Que en sus dudas renacían...
Las cosas que no he querido.

Mi cuerpo lo llevo herido.
Por eso hoy lo resalto.
¡No lo quería rendido!...
Era un animal muy basto.

Con injurias y sobresaltos.
Tenia el corazón sangrante.
¡Pongo a mi Dios por delante!...
¡Era un demonio!; no un santo.

Tapándose con un manto.
Jugaba sobre la cama.
Él lo hacia mientras tanto...
Pero a la fuerza me gana.

Quedando inerme mi alma.
Cercana en mis agonías.
Buscando me alejaría...
Para analizarlo con calma.

Vivía una larga alarma.
Entonces; un monumento.
Trabajaba como barman...
Un hombre sin sentimientos.

Pasando malos momentos.
Concentrando mi alegría.
Con pena y sin energías...
Según lo escribo y lo cuento.

A veces cuando despierto.
En él solo vi a un cuervo.
Mis pechos estaban prietos...
¡Siendo un loco!; estaba cuerdo.

Se envanecen mis recuerdos.
Cada día lo vi distinto.
No llegué nunca a un acuerdo...
Con un paria variopinto.

Muchas veces me repito.
¿El porqué vivía sin gloria?.
Pero eso es otra historia... 
Ya repase el finiquito.

Con una historia del quinto.
Medio cojo y medio tuerto.
¿Sin un ojo yo que pinto?...
Con una aroma de muerto.

En los sinfines de encuentros.
Con mi ignorancia supina.
Siempre acabó el mismo cuento...
Al oír lo que él opina.

Chanchullos que él convina.
Con su físico empujaba.
Con ánimos él me besaba...
Con fragancia a mar marina.

Me acogió como madrina.
Me acosaba y me abrazaba.
En tres costales de harina...
Me tenia amenazada.

¿Que tenia que me embrujaba?.
¿Porque aguantaba soeces?.
Mi corazón lo padece...
Sus celos los repudiaba.

Hay momentos que lo odiaba.
Hubo momentos amenos.
Con finura trajinaba...
Al final no lo condeno.

Sus palabras eran veneno.
Sus injurias y sus insultos.
Siempre de más o de menos...
Me acobardaba a disgustos.

Traspasando aquellos sustos.
Mi cuerpo pedía más guerra.
No estaba loca ni cuerda...
Me daba placer y gusto...

No tenia mas sustitutos.
Así pasaron tres años.
Tres años presa y muy juntos...
Viviendo un amor tacaño.

Tan violento y con apaños.
Me enfurecía tales hechos.
Viendo perder mis derechos...
Que sufría con sus engaños.

Era un varón con reaños.
Un descerebrado duro.
Un hombre me hacia daño...
También me salvó de apuros.

Con pensamientos oscuros.
Con su paciencia y sus trucos.
Cojo y ciego él me obtuvo...
Como el trabajo de un cuco.

¿Al final es lo que yo busco?.
¡Que me traten de ramera!.
Con este safio tan brusco...
¡Que me quiere a su manera!.

"Guti"."El Romancero".

No hay comentarios:

Publicar un comentario